El Obispo de la diócesis de Luçon (Francia), Mons. Francois Jacolin, emitió un comunicado tras el conocimiento del asesinato del P. Olivier Maire en el que aseguró que recibió la noticia "con horror y asombro".
"La muerte brutal de este religioso generoso, este pastor de almas, un buen hombre, nos sumerge en un profundo dolor y una inmensa tristeza", destacó Mons. Jacolin.
Y afirmó que el P. Olivier murió "víctima de su generosidad y mártir de la caridad".
"Nos sumamos al dolor de su familia y de la gran familia monfortiana con la que la Iglesia de Vendéé está en intensa comunión de oración".
El P. Olivier Maire, tenía 60 años y era superior provincial de los misioneros monfortianos, fue asesinado por un hombre de origen ruandés de 40 años que estaba siendo investigado por el incendio de la catedral de Nantes. El P. Maire había acogido a su asesino mientras se desarrollaba la investigación.