Consagradas de Talitha Kum destacan la importancia del cuidado a supervivientes de trata

 

La campaña "CareAgainstTrafficking" quiere demostrar que "el cuidado con atención puede marcar la diferencia en cada etapa de la lucha contra la trata de personas: atención a las personas en riesgo, atención a las víctimas y atención a los supervivientes".

Por ello, Talitha Kum destacó que "por su experiencia sobre el terreno, las consagradas saben que los enfoques a largo plazo centrados en la atención pueden reducir el riesgo de que los supervivientes vuelvan a ser víctimas de la trata y la explotación".

Sin embargo, "estos enfoques requieren una participación institucional que las hermanas no pueden proporcionar por sí solas".

En esta línea, Sor Gabriella Bottani, solicitó a "todas las personas de buena voluntad sumarse para enfrentar las causas sistémicas de la trata de personas, para transformar la economía de la trata en una economía del cuidado".

"En particular, pedimos a los gobiernos comprometerse para apoyar a los supervivientes a largo plazo, garantizando educación de calidad, oportunidades y permisos para trabajar, acceso a la justicia y al resarcimiento y a la asistencia sanitaria y psicosocial", afirmó.

Por su parte, la secretaria ejecutiva de la UISG, Sor Patricia Murray, indicó que Talitha Kum "está comprometida no solamente con el apoyo a las comunidades vulnerables y marginadas de todo el mundo, sino también con el desmantelamiento de los sistemas que permiten su opresión y explotación".

"Impulsadas por la fuerza de su compromiso espiritual, estas religiosas han ayudado a decenas de miles de personas a escapar de la trata y a encontrar un camino para reconstruir vidas libres y dignas", describió Talitha Kum.

En diferentes ocasiones, el Papa Francisco ha lanzado llamados contra la trata de personas.

En 2014, el Santo Padre creó el Grupo de Santa Marta, nombre de su residencia en el Vaticano, para reunir a líderes católicos y jefes de policía internacional para luchar contra este problema.

Ese mismo año, 60 expertos de 33 países representantes de diversas organizaciones de la Iglesia lideradas por Cáritas Internationalis se reunieron, como cada dos años, para encontrar nuevos modos de luchar contra el "segundo negocio clandestino más lucrativo del mundo, después del tráfico de armas y por encima del tráfico de drogas".

En 2015, el Papa Francisco dedicó su Mensaje para la Jornada de la Paz a este problema, como prioridad clave de la diplomacia internacional de la Santa Sede.

Por su parte, el entonces Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, Mons. Bernardito Auza, recordó en 2016 que el Pontífice se ha pronunciado reiteradamente sobre este "horror" y todas las "formas de esclavitud moderna", y que los institutos católicos religiosos, programas nacionales y diocesanos y fieles luchan contra sus causas, atienden a las víctimas y concientizan a la gente.

En 2019, la Unión Internacional de Superioras y Superiores Generales (UISG) organizó la Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, promovida por el Papa Francisco y celebrada cada 8 de febrero con motivo del día de San Josefina Bakhita, secuestrada a los 9 años para ser esclavizada y torturada y que es reconocida por su espiritualidad y fuerza contras las adversidades.

El 8 de febrero de 2021, con motivo de la Jornada Mundial de oración y reflexión contra la trata de personas, el Papa Francisco pidió rezar "para sostener a las víctimas de la trata, y a las personas que acompañan los procesos de integración y reinserción social". Además, señaló que la oración debe impulsar "acciones concretas" que permitan a cada persona esclavizada volver a "ser protagonista libre de su vida" a favor del bien común.

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