La Arquidiócesis de Managua (Nicaragua) canceló las procesiones y actividades religiosas "que impliquen una concentración excesiva de fieles" para evitar contagios de COVID-19, en medio de la crítica situación sanitaria que afronta el país.
En un comunicado del 18 de julio, firmado por el Arzobispo de Managua, Cardenal Leopoldo Brenes, se confirmó la cancelación de las procesiones y fiestas patronales con gran participación pública presencial para no agravar la situación de COVID-19 en el país.
En la "Circular sobre festividades patronales 2021", el Purpurado dijo que "la crítica situación sanitaria por la pandemia del COVID, así como las mutaciones de este virus que están causando angustia, dolor, y muerte entre nosotros, nos exige mantener como Iglesia la opción responsable por la vida que implica evitar al máximo las aglomeraciones de personas".
Aseguró que luego de "escuchar y valorar diversas opiniones, sobre todo las de los especialistas en salud, […] aún no es tiempo para realizar procesiones y actividades religiosas que impliquen concentración excesiva de fieles" en la arquidiócesis.
El Cardenal Brenes subrayó que la medida "no es falta de fe, ni falta de aprecio a nuestra piedad popular", sino que se tomó como "responsabilidad de Iglesia y reconocimiento consciente que la verdadera piedad y devoción están en el corazón que se hace altar, y como signo agradecido del amor a Cristo, a nuestra Madre Santísima y a nuestros Santos Patronos".
En ese sentido, exhortó a los fieles a que en medio de la crítica realidad sanitaria que afrontan por la pandemia, tengan "una actitud de solidaridad con quienes están padeciendo los efectos de esta enfermedad, sus familias y la generosa entrega del personal de salud, quienes en muchos casos son también parte de nuestra comunidad eclesial".