Un grupo de activistas vandalizaron una estatua de Jesús conocida como el "Cristo de Ozarks" en Arkansas (Estados Unidos), colocando una pancarta pintada en la que se leía "Dios bendiga los abortos".
En un comunicado publicado en su cuenta de Instagram, el grupo "INDECLINE", que se autodefine como un "colectivo activista de arte", explicó que "creemos que Jesús entendería el concepto de una decisión difícil".
"Supuestamente él tuvo que tomar algunas decisiones difíciles y entendió el concepto del sacrificio muy íntimamente", continuó.
"El Cristo de Ozarks es visible desde millas de distancia, así que la tratamos como una cartelera", añadió el grupo de activistas.
Tras decir que "no somos necesariamente 'pro-elección' o 'anti-vida'", el grupo aseguró que "solo pensamos que el aborto es un maldito milagro que vale celebrar. Salva vidas, pero esas vidas son usualmente femeninas".