REDACCION CENTRAL,
Luego del hallazgo de tumbas no identificadas con restos de cientos de niños indígenas en antiguas residenciales católicas de Canadá a fines de mayo, hasta la fecha al menos 10 templos católicos y anglicanos han sido dañados o destruidos con incendios provocados.
Varias de las iglesias afectadas, en su mayoría católicas, se encuentran en el territorio de las Naciones Originarias de Canadá –o Primeras Naciones–, que vivían al sur de la región ártica del actual Canadá.
Respecto al motivo de esta ola de vandalismo, se cree que es una reacción a la confirmación de más de mil tumbas sin nombre en varias sedes de antiguas escuelas residenciales, de las cuales más de la mitad fueron administradas por la Iglesia Católica entre 1831 y 1996.
El 22 de mayo se encontraron las primeras 215 tumbas anónimas de niños indígenas en la Escuela Residencial Indígena Kamloops, en Columbia Británica. Luego, el 24 de junio, los líderes de la Primera Nación de Cowessess anunciaron que se habían descubierto otras 751 tumbas sin nombre en el sitio de la antigua Escuela Residencial Indígena Marieval.
Otros 182 restos humanos se encontraron en tumbas anónimas cerca de la antigua Escuela de la Misión de San Eugenio dirigida por católicos en Cranbrook, Colombia Británica.
Por el momento, se desconoce de qué forma murieron los menores y su identidad, ya que no se documentó ni las muertes ni los enterramientos. El hallazgo de las tumbas se produjo gracias al uso de un radar de penetración terrestre.