Tras la aprobación en el Consejo de Ministros de la Ley Trans, Mons. Luis Argüello, portavoz de la Conferencia Episcopal Española y Obispo auxiliar de Valladolid (España) aseguró que esta ley "transforma el sentimiento en categoría jurídica y entroniza la voluntad de poder sin ningún límite".
También destacó que "ignora la realidad sexuada de todas las células del cuerpo y, sobre todo, desprecia a las personas que sufren al proponerles como saida el cambio del DNI".
El Consejo de Ministros del Gobierno de España aprobó hoy 29 de junio el proyecto de ley para la igualdad real y efectiva de las personas trans y para la garantía de los derechos LGTBI, conocida como ley trans.
El texto prevé la autodeteminación de género, por lo que una persona puede cambiar el nombre y el sexo en el DNI tan solo presentando su declaración y sin necesidad de informes médicos o haber iniciado un proceso de hormonación, como era requerido hasta ahora.
Podrá solicitarse desde los 12 años, con autorización judicial. De los 14 a los 16 años con consentimiento de sus representantes legales, y después de los 16 años podrá ir al registro civil sola, sin necesidad de que nadie certifique su cambio.