Angelo pasó muchos años inmerso en el estilo de vida gay, la promiscuidad y las drogas recreativas, hasta que dejó todo atrás de la mano de Courage, un ministerio católico internacional que ayuda a las personas con atracción al mismo sexo: "Solo necesitaba a Dios, básicamente".
Al compartir su testimonio en un reciente video publicado por Courage, Angelo dijo que "saber que soy amado, eso fue clave, eso aún es clave. Y tengo mucho que trabajar en eso porque todavía puedo olvidar eso, pero cuando sabes que eres amado, muchas de las cosas se desvanecen, ¿sabes?".
Saber que eres amado, aseguró, "permite que la gracia de Dios entre en nuestros corazones y mentes, de tal forma que podemos hacer mejores elecciones", así como "hacer Su voluntad".
"Y luego compartir con otros", añadió.
"Lo que obtengo de Dios lo tengo que compartir con otros, porque si no ¿qué de bueno es?", dijo.
Angelo recordó que desde joven "había una atracción a hombres", aunque "en ese momento no había ninguna lujuria hacia ellos, solo había una fascinación con los hombres".