“El Cielo no puede esperar”: Anuncian película sobre la vida e intercesión de Carlo Acutis

Además de testimonios de su intercesión, la película "El Cielo no puede esperar" recorre los principales momentos de la biografía de Carlo Acutis, recreados en una parte de ficción.

Un grupo de jóvenes devotos de Acutis de entre 20 y 25 años hacen las veces de narradores de la historia, a la vez que ofrecen el testimonio de la acción del beato en sus vidas.

En "El Cielo no puede esperar" se mostrarán documentos e imágenes inéditas de este joven beato que ilustran, por ejemplo, su vida familiar, la relación privilegiada con el Padre Pío o "el estado muy íntegro", cercano a la incorruptibilidad cadavérica, apreciado durante la exhumación de su cuerpo el 23 de enero de 2019.

Los productores de la película han puesto en marcha una campaña de donaciones a través de una plataforma de crowfunding.

¿Quién fue Carlo Acutis?

Carlo Acutis fue un adolescente italiano que murió cuando tenía 15 años, en el año 2006 y que fue beatificado el 10 de octubre de 2020 en Asís (Italia).

Carlo Acutis nació el 3 de mayo de 1991 en Londres (Inglaterra) donde trabajaban sus padres y pocos meses después su familia se trasladó a Milán (Italia). Siendo adolescente le fue diagnosticada leucemia, y él ofreció sus sufrimientos "por el Señor, el Papa y la Iglesia".

Murió el 12 de octubre de 2006, día de la Virgen del Pilar. Fue sepultado en Asís (Italia) a pedido suyo, debido al gran amor que le tenía a San Francisco.

Su causa de beatificación y canonización se abrió en 2013. Fue declarado venerable en 2018 y beatificado el 10 de octubre de 2020.

Desde muy pequeño Carlo mostró un especial amor a Dios, aunque sus padres no eran especialmente devotos. Su madre aseguró que antes de Carlo solo fue a Misa en su Primera Comunión, su Confirmación y su Matrimonio.

Carlo también amaba rezar el Rosario. Tras su Primera Comunión iba a Misa con frecuencia y se quedaba rezando en Hora Santa luego de la Eucaristía. Se confesaba una vez a la semana.

Le pedía a sus padres que lo llevaran en peregrinación a los lugares de los santos y a los sitios de los milagros eucarísticos.

Su testimonio de fe llevó a una profunda conversión a su madre porque, de acuerdo al sacerdote que promueve su causa, él "logró acercar a sus familiares, a sus padres a la Misa diariamente. No fue al revés, no fueron los padres los que llevaron al pequeño a Misa sino era él quien iba a Misa y que convenció a otros de recibir la Eucaristía todos los días".

Promovió los milagros eucarísticos, especialmente a través de un sitio web que diseñó con ese fin. Allí le decía a la gente que "cuanto más frecuente sea nuestra recepción de la Eucaristía, más seremos como Jesús. Y en esta tierra podremos pregustar el Cielo".

Cuando Carlo enfermó su vida de fe aumentó. Tenía toda la intención de ofrecer su sufrimiento por la Iglesia, el Papa y la gente enferma.

Su intercesión resultó decisiva para curar al niño brasileño Matheus de una malformación congénita en el páncreas que le abocaba a la muerte, cuyo milagro sirvió para su beatificación.

Aunque inicialmente se dijo que el cuerpo de Carlo Acutis había sido encontrado incorrupto, el portavoz de la beatificación de Acutis precisó que el cuerpo está íntegro pero "no incorrupto".

La devoción a Carlo Acutis está muy extendida, muestra de ello son los más de doscientos sitios y blogs dedicados a su persona, además de escuelas, un Liceo de Francia, y oratorios que llevan su nombre.

Más información sobre cómo colaborar con "El Cielo no puede esperar" AQUÍ.