Desde el pasado 1 de mayo no se expedirán más Libros de Familia, documento que acreditaba en España y otros países, las relaciones de parentesco, y se sustituye por un registro individual. Mons. Argüello y Mons. Munilla criticaron esta decisión y subrayaron que responde a una concepción individualista de la sociedad, mientras que para los cristianos una nación es una "familia de familias".
Mons. Luis Argüello, portavoz de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y Obispo auxiliar de Valladolid (España) calificó la supresión del Libro de Familia en España como "un síntoma y símbolo de la falta de reconocimiento institucional de la familia".
"Seguramente se dirá que solo es un cambio burocrático, pero es síntoma y símbolo de la falta de reconocimiento institucional de la familia y de la comprensión de la sociedad como suma de individuos y no como familia de familias", precisó Mons. Argüello a través de su cuenta en Twitter.