El Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Ranchi, en el estado de Jharkhand (India), Mons. Theodore Mascarenhas, informó que la grave crisis de salud en el país está afectando duramente al clero en la pandemia del COVID-19, pues cinco sacerdotes infectados de una diócesis murieron en solo 10 días.
El Prelado relató a EWTN News que siete sacerdotes infectados con COVID-19 de su Arquidiócesis que están en el centro de salud fueron "afortunados" porque "encontraron una cama" donde ser atendidos. Conteniendo las lágrimas, Mons. Mascarenhas dijo que él mismo trasladó a cada uno de ellos al hospital, porque no había ambulancias disponibles.
Señaló que ante la falta de camas para pacientes en los hospitales locales, alojó a otros seminaristas en una casa de reposo; y también, lamentó el fallecimiento de uno de sus jóvenes sacerdotes, al que acompañó y "le dio agua de coco hasta el final".
"Tengo otros siete seminaristas enfermos, acostados en sus camas en una casa cercana al hospital. Los llevé a un hogar de ancianos, porque no había lugar en el hospital. Perdí a un sacerdote, de 30 años, apenas un año de ordenación […] hace cinco días. Y duele", dijo.
El Prelado agregó que en lapso de solo 10 días, cinco sacerdotes de la Diócesis de Dumka, ubicada también en el estado de Jharkhand, fallecieron por COVID-19. Además, lamentó que las personas más pobres en la ciudad ni siquiera puedan acceder a una atención de salud.