La ministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, del partido Podemos, acusó a la Iglesia Católica de ser cómplice "demasiadas veces" de encubrimiento de violencia sexual contra menores, pese a que el estudio de la Fundación ANAR, que abarca del 2008 al 2019, reveló que los sacerdotes son responsables del 0,2% de los casos de abusos sexuales en España.
Belarra hizo su acusación ayer en el Congreso de los Diputados de España, durante la votación y aprobación del proyecto de ley orgánica de protección a la infancia y a la adolescencia ante la violencia, también conocida como Ley Rhodes.
"Es una verdad incómoda pero hay que decir que la Iglesia católica ha sido cómplice demasiadas veces en este país encubriendo la violencia sexual hacia los niños, y esto tiene que terminar", dijo, e hizo referencia al caso de Emiliano, un joven que sufrió abusos sexuales a los 10 años de parte de un sacerdote en el seminario donde estudiaba.
Posteriormente, Belarra dijo en la Cadena Ser que los católicos son los "primeros interesados" en que se conozcan los casos de violencia sexual y que "no siga existiendo complicidad" dentro de la Iglesia.
La Fundación ANAR (Ayuda a Niños y Adolescentes en Riesgo) publicó en febrero de 2021 el informe "Abuso sexual en la infancia y la adolescencia según los afectados y su evolución en España" que abarca desde el año 2008 al 2019, en el que se refleja que el 23,3% de los casos de abuso sexual a niños fueron cometidos por el padre de la víctima, frente al 0,2% cometidos por sacerdotes.