En un artículo publicado en la red social Hozana, reflexionando sobre el testimonio de la vidente Santa Faustina Kowalska, el P. Eugeniusz Malachwiejczyk señaló por qué la Fiesta de la Divina Misericordia "es excepcional".
La Fiesta de la Divina Misericordia, que se celebra en el segundo domingo de Pascua, fue instituida por San Juan Pablo II en el año 2000.
Juan Pablo II, cuando era Arzobispo de Cracovia (Polonia), fue quien presidió la sesión solemne que puso punto final al proceso informativo diocesano para recopilar todos los datos y testimonios sobre la vida y obra de Santa María Faustina Kowalska.
Las actas del proceso fueron enviadas a Roma para abrir el proceso de beatificación de la vidente del Señor de la Divina Misericordia.
Santa Faustina fue beatificada y canonizada por San Juan Pablo II en 1993 y en el año 2000, respectivamente.
El P. Malachwiejczyk recordó uno de los mensajes de Jesucristo a Santa Faustina, en el que se señala que en el día de la Divina Misericordia "se abren las entrañas de mi misericordia, derramo todo un océano de gracias sobre las almas que se acercan a la fuente de mi misericordia".