REDACCION CENTRAL,
El Papa Francisco condenó los actos de violencia que han sucedido en las últimas semanas en la región del Pacífico y el suroccidente de Colombia, que integra los departamentos de Valle del Cauca, Cauca y Nariño, y expresó su cercanía a las comunidades afectadas.
Desde hace dos semanas ocurren enfrentamientos entre facciones guerrilleras disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) por el control del narcotráfico en Nariño, en la frontera entre Colombia y Ecuador.
El diario local El Espectador señala que los habitantes viven atemorizados por el aumento de casos de reclutamiento forzado, masacres y desplazamientos.
Una situación similar sucede en las regiones fronterizas de Arauca (Colombia), y Apure (Venezuela), donde se han producido enfrentamientos entre el ejército venezolano y otro grupo disidente de la guerrilla colombiana.
Como consecuencia de la violencia hay un desplazamiento masivo de migrantes venezolanos a Arauca.
Ante ese panorama, el Secretario de Estado del Vaticano, Cardenal Pietro Parolín envió una carta al presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, Mons. Óscar Urbina Ortega, en la que transmite el sentir del Papa Francisco.