La Pontificia Academia para la Vida, encabezada por Mons. Vincenzo Paglia, elogió al fallecido Hans Küng, el primer teólogo sancionado durante el pontificado de San Juan Pablo II.
En una publicación en su cuenta de Twitter el 6 de abril, la Pontificia Academia para la Vida dijo que con la muerte de Küng, conocido defensor de la eutanasia, "desaparece una gran figura en la teología del último siglo, cuyas ideas y análisis siempre deben hacernos reflexionar sobre la Iglesia Católica, las Iglesias, la sociedad, la cultura".
Küng, que sirvió como asesor durante el Concilio Vaticano II pero que en distintas ocasiones se opuso a la doctrina católica, falleció este martes 6 de abril a los 93 años.
En 1979, la Congregación para la Doctrina de la Fe (CDF), en un documento aprobado por San Juan Pablo II, dijo que Küng "ha faltado a la integridad de la verdad de la fe católica, y por tanto que no puede ser considerado como teólogo católico y que no puede ejercer como tal el oficio de enseñar".
En esa ocasión, la CDF señaló que "cuando se dé el caso de que un maestro de las disciplinas sagradas escoge y difunde como norma de la verdad el propio criterio y no el sentir de la Iglesia y, no obstante haber usado con él todos los medios sugeridos por la caridad, continúa en su propósito, la misma honradez exige que la Iglesia ponga en evidencia tal comportamiento y establezca que ya no puede enseñar en virtud de la misión recibida de ella".