Denuncian que estudiantes mexicanas asesoran abortos clandestinos

El Código Penal del estado mexicano de Puebla reconoce al aborto como un delito, y lo define como "la muerte del producto de la concepción en cualquier momento de la preñez".

En los casos en los que cuente con consentimiento, a quien haga abortar a una mujer "se le aplicarán de uno a tres años de prisión", señala el Código Penal.

Espino dijo que él hizo pública la denuncia en TikTok, tras lo que Kiana "dio de baja inmediatamente sus redes sociales".

Luego su denuncia se difundió en Twitter y otras redes sociales.

"A pesar de que yo soy provida, esto no es una cuestión de si estamos a favor o en contra del aborto, sino de que se está cometiendo un delito, y de que una estudiante de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla está utilizando sus conocimientos adquiridos en la institución para cometer ese delito, para ejercer la profesión sin cédula", explicó.

El joven provida lamentó que "por parte de la universidad lo que ha primado es el silencio".

ACI Prensa ha remitido consultas sobre el caso al rector de la BUAP, Alfonso Esparza, a través de distintas plataformas sin obtener respuesta.

Para Christer Espino, lo importante tras la denuncia es "que quede un antes y un después".

"Ayer estas chicas estaban cometiendo abortos como si de vender cacahuates (maníes) se tratara. Hoy ya no. Hoy ya saben que las estamos vigilando. Esto tiene que repercutir en el futuro", dijo.

María Aissata Si González publicó diversos videos en su página de Facebook Med Prochoice, diciendo que las denuncias realizadas por Christer Espino y diversos jóvenes provida son acoso.

"Yo quería intentar poder vivir de mi activismo, de difundir información, no depender de otro ingreso y que esto no sea un hobby sino que esto fuera un trabajo real para poder dedicarme a ayudarlas", dijo entre lágrimas, añadiendo que "yo quería hacer mi fundación".

"Se me hizo fácil hacer mis talleres y me fue muy bien", señaló.

Sin embargo, tras dejar las lágrimas, Si González aseguró que "no me voy a rendir ni con todo ese dolor ni con todas esas lágrimas".

"Esto no es amenaza, esto no es advertencia, esto es una profecía: (el aborto) va a ser ley, punto. Y si tengo que acabar en la cárcel, y si tengo que sufrir (…) lo voy a hacer", continuó.

Para la activista de la legalización del aborto en México, los jóvenes provida viven en una "burbujita de privilegios", y señaló que "no pueden destruirme".

#AbortoClandestinoBUAP, el hashtag creado por los jóvenes provida para denunciar la asesoría de la estudiante de medicina de la BUAP para abortos clandestinos, se convirtió en una de las principales tendencias de la red social Twitter en México el 30 de marzo.

"Los jóvenes provida no se quedaron callados"

Marcial Padilla, director de la plataforma provida ConParticipación, dijo a ACI Prensa que "es muy interesante ver el papel y el poder que las redes sociales van tomando en la causa provida".

"En esta ocasión, a través de la plataforma TikTok se dieron cuenta de un grupo de promotores del aborto que alardean precisamente en esa plataforma y en otras de estar, lo dicen ellas, acompañando a otras mujeres que cometan el aborto", dijo.

"Eso, en primer lugar, es quitarle la vida a un hijo antes de nacer. Pero además es peligroso para la mujer que lo comete. Y además es ilegal, porque el aborto es un delito", añadió.

Padilla destacó que "los jóvenes provida no se quedaron callados, dijeron 'debo actuar y debo actuar ya'".

"A partir de la iniciativa de un joven estudiante de Veracruz muy activo en redes sociales se pusieron de acuerdo y dijeron vamos a evidenciarla, vamos a hacer que su universidad sepa que están haciendo esto", indicó.

Los jóvenes provida, continuó, "identificaron los nombres de las personas involucradas en promover este aborto clandestino, en dar las medicinas, y crearon una carta con la cual la denunciaban a una de ellas, que es estudiante de Medicina, ante las autoridades de su universidad".

"Pero también daban a conocer los nombres de las otras mujeres que están promoviendo cometer abortos", indicó.

El director de ConParticipación, este caso muestra que "los jóvenes van tomando la voz".

La defensa de la vida, añadió, "no es una cuestión de generaciones, es una cuestión de justicia, de verdad, de libertad. De la libertad para defender el derecho a la vida".

Además, expresó su aliento para "que esto no se detenga, que los jóvenes provida vayan tomando la bandera de la causa de defensas de la vida".

Rodrigo Iván Cortés, presidente del Frente Nacional por la Familia (FNF) señaló que en casos como este "se puede ver cómo la tergiversación que se hace desde las instituciones lo que trata de hacer es generar una nueva normalidad".

"De lo que se trata para algunas instancias y grupos es de normalizar, por ejemplo, el crimen del aborto", dijo.

Cortés dijo que "en este caso vemos un resultado: si en todas las universidades están tratando de meter cátedras de acción de género y de los así llamados 'nuevos derechos sexuales y reproductivos' y tratan de normalizar esto, lo hacen sin tomar en cuenta ni lo que implica en sí ni que esto sea un crimen ahí donde se promueva".

"¿Qué pasaría si en vez de asesinar a un ser indefenso en el vientre de su madre, habláramos de asesinar a una mujer ya nacida? Obviamente muchos se alarmarían, como es lógico", señaló.

"Pero en este caso, lo que van avanzando es en normalizar ese crimen aunque sea una mujer, nada más que en el vientre materno se vale", lamentó.

El presidente del FNF criticó además que "se puede cometer toda la violencia que sea mientras uno se autoproclame feminista y esté en torno al 8, 9 de marzo o alguna fecha de ese tipo".

"Entonces es perfectamente válido quemar, romper, golpear, utilizar el lenguaje que sea lo más agresivo posible en contra de todo hombre por el hecho de ser hombre".

"Vemos entonces cómo esta normalización hace que sobre todo los jóvenes, y en este caso estas estudiantes, emprendan actividades que ya completamente están en el terreno de lo criminal, en una irresponsabilidad mayúscula que puede no solo causar la muerte del infante sino también de la mujer que aborta".

"Es una cuestión de la cual se debería tomar conciencia y las universidades mismas deberían tomar en cuenta que no se puede seguir así", expresó.