Los obispos de Japón conmemoraron el aniversario del desastre nuclear de Fukushima con una oración por los fallecidos y prometieron que continuarán los esfuerzos de reconstrucción de la Iglesia en la región.
El 11 de marzo de 2011, un terremoto de magnitud 9 provocó un colapso en la central nuclear de Fukushima que mató a casi 20 mil personas y se considera el peor desastre nuclear desde Chernobyl.
En un comunicado, los obispos del país señalaron que "la Iglesia Católica en Japón no se limita al apoyo material, sino que seguirá caminando con solidaridad con el pueblo de Tohoku".
"Una solidaridad que se extiende por todo el mundo para elevar nuestro horizonte y nuestra esperanza", resaltaron.
Luego del desastre nuclear, la Iglesia Católica en Japón estableció un centro de asistencia para la reconstrucción en la Diócesis de Sendai, que cubre el área afectada, y prometió que las 16 diócesis del país trabajarían juntas para brindar asistencia para la reconstrucción durante los próximos 10 años.
En su declaración, los obispos japoneses agradecieron a los voluntarios y al apoyo internacional que contribuyeron en lograr esta meta.