VATICANO,
Durante el rezo del Ángelus de este Domingo 24 de enero, el Papa Francisco advirtió que "la salvación no es automática" sino que es un don de amor que requiere una respuesta libre y nuestra conversión.
Al reflexionar en el pasaje del Evangelio de San Marcos de este tercer Domingo del tiempo ordinario (Mc 1,14-20) que relata cuando Jesucristo dijo "el tiempo se ha cumplido y el Reino de Dios está cerca; conviértanse y crean en el Evangelio", el Santo destacó que "Jesús no usaba medias palabras" sino que dirige un mensaje "que nos invita a reflexionar sobre dos temas esenciales: el tiempo y la conversión".
"La salvación no es automática; la salvación es un don de amor, y como tal, abierto a la libertad humana. Siempre cuando se habla de amor, se habla de libertad, un amor sin libertad no es amor, puede ser interés, miedo, muchas cosas, pero el amor es siempre libre, y siendo libre, requiere una respuesta libre: requiere nuestra conversión", dijo el Papa.
En esta línea, el Santo Padre señaló que la conversión es "cambiar de mentalidad y cambiar de vida: no seguir más los modelos del mundo, sino el de Dios, que es Jesús, seguir Jesús, como hizo Jesús y como nos enseñó Jesús".
"Es un cambio decisivo de visión y de actitud. De hecho, el pecado trajo al mundo una mentalidad que tiende a la afirmación de uno mismo contra los demás, e incluso contra Dios", advirtió.
Por ello, el Papa alertó el peligro de "la mentalidad del engaño, que tiene su origen en el padre del engaño, en el gran mentiroso, el diablo, el padre de la mentira, así lo define Jesús".