La Conferencia Episcopal Portuguesa (CEP) informó que tuvo que suspender nuevamente las Misas con la presencia de fieles a partir de este sábado 23 de enero, debido a la "extrema gravedad de la situación pandémica" del país.
Una medida igual tomó el Episcopado portugués en marzo de 2020 al inicio de la pandemia del nuevo coronavirus y se mantuvo hasta mayo.
La CEP indicó que, "aunque lamenta hacerlo", se determina "la suspensión de la celebración 'pública' de la Eucaristía a partir del 23 de enero de 2021, así como la suspensión de la catequesis y otras actividades pastorales que implican contacto, incluso nuevas pautas ".
Sin embargo, subrayó que "las diócesis de las regiones autónomas de las Azores y Madeira darán sus propias pautas".
En su comunicado, los obispos portugueses llamaron a informar a los fieles y a transmitir las Misas por los medios digitales.
El Episcopado también informó que los funerales deberán "celebrarse de acuerdo con las directrices de la Conferencia Episcopal del 8 de mayo de 2020 y las autoridades competentes".