VATICANO,
La Comisión Vaticana COVID 19 hizo pública una Nota en la que señala que existe "la responsabilidad moral de vacunarse" contra la COVID 19 en cuanto sea posible, ya que el rechazo a la vacuna puede suponer "un riesgo para la salud de otros".
En la Nota, emitida este martes 29 de diciembre junto con la Pontificia Academia para la Vida, se recuerda que el Papa Francisco afirmó en varias ocasiones "la necesidad de lograr que las inminentes vacunas contra el Covid-19 estén disponibles y sean accesibles para todos", especialmente "para los más vulnerables y necesitados".
Además, se subraya el llamamiento del Santo Padre a apoyar a aquellas empresas farmacéuticas que "contribuyen a la inclusión de los excluidos, a la promoción de los últimos, al bien común y al cuidado de la creación".
Asimismo, se presentan una serie de "implicaciones éticas que deben ser consideradas a la hora de tomar las decisiones políticas (económicas), de organización y de comunicación necesarias" en el proceso de vacunación.
En primer lugar, aborda el problema del uso de "material biológico procedente de fetos abortados voluntariamente" en algunas de las vacunas "cercanas a la aprobación".
El documento señala que "la finalidad de la salud (pública) no puede justificar el aborto voluntario para obtener material celular para la producción de vacunas", sin embargo, recuerda que la Instrucción Dignitas Personae de la Congregación para la Doctrina de la Fe establece que "razones de particular gravedad podrían ser moralmente proporcionadas como para justificar el uso de ese 'material biológico'".