VATICANO,
Después de dirigir el rezo del Ángelus este domingo 27 de diciembre, fiesta de la Sagrada Familia, el Papa Francisco rezó por las familias que han perdido un ser querido o han sido más afectadas por las consecuencias de la pandemia del COVID-19.
"Mi pensamiento se dirige en particular a las familias que en los últimos meses han perdido a un familiar o han sido afectadas por las consecuencias de la pandemia. Pienso también en los médicos, enfermeros y todo el personal sanitario cuyo gran compromiso al frente de la lucha contra la propagación del virus ha tenido repercusiones importantes en la vida familiar", dijo el Papa en la biblioteca del palacio apostólico.
En esta línea, el Santo Padre encomendó también al Señor a "todas las familias, especialmente las más afectadas por las dificultades de la vida y por las llagas de la incomprensión y de la división".
"Que el Señor, nacido en Belén, conceda a todos la serenidad y la fuerza para caminar unidos por el camino del bien", rezó el Papa.
Previamente, el Pontífice destacó que "la familia evangeliza con el ejemplo de vida" y añadió que la familia de Nazaret es el modelo para todas las familias del mundo "en la que todas las familias del mundo pueden hallar su sólido punto de referencia y una firme inspiración".
Por ello, el Papa animó a "redescubrir el valor educativo del núcleo familiar, que debe fundamentarse en el amor que siempre regenera las relaciones abriendo horizontes de esperanza".