María de Urraza, tocoginecóloga del Hospital de Florencio Varela de Buenos Aires (Argentina), explicó a los senadores la cruda realidad que se vive en los hospitales públicos con motivo de los abortos tardíos y a libre demanda.
De Urraza expuso este 16 de diciembre, en la segunda jornada informativa de las comisiones de Banca de la Mujer, de Justicia y Asuntos Penales y de Salud del Senado de Argentina.
La profesional de la salud explicó que el proyecto antivida busca "promover el aborto eugenésico" y "legitimar lo que ya realizan en los hospitales: el aborto a libre demanda y sin límite de edad gestacional".
Además, "ampliar la cobertura del aborto irrestricto a todo el país; aumentar la cantidad de abortos; amedrentar a los médicos que todavía nos oponemos a actuar contra las leyes de la humanidad y en contra de nuestra conciencia; y garantizar el acceso al aborto en clínicas privadas para que las mujeres de mayor poder adquisitivo no tengan que pasar por la situación de internarse en hospitales públicos".
"En los hospitales de la provincia de Buenos Aires el aborto es libre, es decir, accesible. Cualquier mujer que quiera hacerse un aborto, se acerca a un centro de salud, firma una declaración jurada con alguna causal y aborta", aseguró de Urraza.
"Es gratuito porque se hace en hospitales públicos. Y es seguro, según el Ministerio de Salud, que directamente no se interesa en contabilizar las complicaciones existentes en los hospitales".