REDACCION CENTRAL,
Luego de que el Gobierno de Costa Rica aprobó el 4 de diciembre el protocolo de aplicación del mal llamado aborto "terapéutico", los obispos del país volvieron a pronunciarse contra la "cultura de la muerte" y criticaron varios puntos de la norma.
En su comunicado publicado el martes 8 de diciembre, los obispos dijeron "¡no al aborto, no a la cultura de la muerte!", porque "el no nacido no es un 'producto', es persona humana".
Los prelados indicaron a la opinión pública que "con evidente sorpresa" recibieron "al inicio del Adviento, tiempo de celebración de la vida, la noticia de la aprobación del llamado 'Protocolo de Atención Clínica para el procedimiento médico vinculado con el artículo 121 del código penal: Interrupción Terapéutica del Embarazo'".
"Ha sido emanado –continuaron– desde la Caja Costarricense de Seguro Social, institución hasta ahora emblemática de la defensa de la salud y la vida de los costarricenses, y aprobado por el Ministerio de Salud, protocolo que operacionaliza la llamada 'Norma Técnica para el procedimiento médico vinculado con el artículo 121 del Código Penal', mediante el Decreto Ejecutivo número 42113-S".
El comunicado precisa que "en una sociedad de derecho, el respeto a la vida de todo ser humano constituye la columna vertebral, dado que la vida es el primero y más fundamental de los derechos. Estar vivos nos permite ejercer todos los demás derechos".
"Ahora bien, la embriología ha demostrado, sin lugar a dudas, que, desde la fecundación o fertilización, biológicamente está determinada la identidad genética de un nuevo individuo y la pertenencia a una especie en concreto: la humana", recordaron los obispos, y agregaron que "se debe respetar, por tanto, a esos individuos, su dignidad intrínseca, así́ como todos sus derechos, el derecho a la vida, que, según nuestra Constitución Política es inviolable".