Scott Collier, conocido como 'Catfish', fue diagnosticado con cáncer en estadío IV a los 43 años en febrero de 2018. La primera cirugía reveló un tumor grande y células cancerosas en todo su abdomen. Los médicos le dijeron que solo le quedaban de semanas a meses de vida. Entonces, Scott enfrentó una batalla doble: luchar contra el cáncer y abrir su corazón para el perdón.
Antes de su diagnóstico, Scott vivía en Denver (Colorado, Estados Unidos), a dos casas de la casa de Shirley y su hija Rosalie, que a su vez es madre de la pequeña Neveah. Entonces Scott vivía solo, se dedicaba a trabajar fuera de casa en un empleo que odiaba y se preparaba para vender su propiedad.
Su vida transcurría sin mayor novedad hasta que conoció a Neveah, de 5 años, que solía montar bicicleta tratando de llamar su atención. "Un día me pidió que arreglara sus ruedas de entrenamiento. Hice lo que haría cualquier ser humano. Dejé lo que estaba haciendo, le compré un nuevo juego de ruedas de entrenamiento y se las puse", dijo a National Catholic Register.
Sin embargo, después de ese encuentro su rutinaria vida empezó a cambiar. "Al día siguiente, me pidió que se las ajustara, y luego al día siguiente, algo más. Antes de darme cuenta, todas las noches estaba en su casa jugando a las 'chapadas' o pasando tiempo con su familia", dijo.
La amistad que entabló con sus vecinas fue "hermosa" y se volvió muy cercana: iban a Misa juntos muchas veces, se reunían todos los años en el Día de la Madre y viajaron a la montaña, una de las actividades que le apasionaban a Scott.