El Cardenal Juan José Omella, Arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española, inauguró la Asamblea Plenaria con un discurso en el que habló sobre la reforma de la Ley de Educación y defendió la escuela concertada; se refirió a los cuidados paliativos como respuesta a la eutanasia e hizo un llamamiento al espíritu de concordia para aplacar la situación de emergencia nacional y mundial que vive el mundo.
En su discurso inaugural, el presidente de los Obispos españoles afirmó que la situación actual somete a la sociedad a un intenso estrés "que agudiza las diferencias entre unos y otros" y ante el riesgo de que aflore el resentimiento y la división, debemos potenciar la comunión para vencer este desafío que no es solo sanitario, sino también económico, social, político y espiritual".
Espíritu de concordia
Por eso recordó el reciente encuentro entre el Papa Francisco y el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, en donde el Papa le aseguró que es necesario "construir una patria con todos".
Según afirmó el Cardenal "no es momento de divisiones, no es momento para dejar que los brotes populistas irresponsables e ideológicos traten de colarse. Es el momento de la cohesión, de la cordialidad, de trabajar unidos, de mirar a largo plazo liberándonos del cortoplacismo de las elecciones o de la bolsa".
Animó "centrarse en encontrar soluciones que ayuden a salir a flote a las familias que se están hundiendo, a los empresarios que no tienen más remedio que cerrar sus negocios. Por tanto, es conveniente evitar distracciones inútiles y polarizadoras que no conducen a la solución de la grave crisis que nos afecta".