Distintas conferencias episcopales manifestaron su fraternidad y cercanía con la Iglesia en Chile ante los recientes ataques a tres de sus templos.
Los mensajes dirigidos al presidente de la Conferencia Episcopal de Chile y Obispo Castrense, Mons. Santiago Silva, tuvieron expresiones de afecto ante el dolor de la destrucción de iglesias en el contexto de las manifestaciones sociales en el país.
La parroquia de La Asunción y la iglesia San Francisco de Borja en Santiago de Chile quedaron completamente destruidas luego de voraces incendios el 18 de octubre, mientras que la iglesia de San Francisco de Asís en La Serena fue saqueada y destruida la noche del lunes 19.
Estos ataques ocurren en el contexto de las manifestaciones a un año del estallido social en el país sureño y a pocos días de celebrarse un plebiscito constitucional el 25 de octubre.
La Conferencia Episcopal Española se unió "profundamente al dolor del pueblo católico por los ataques sufridos en los últimos días".
Indicó que ruega "a Dios que derrame su gracia en el pueblo chileno para que aplaque el corazón de los violentos y brote el respeto de la verdad, la justicia y los derechos humanos", describió un comunicado de la página web.