MADRID,
La organización Manos Unidas, que financia proyectos en países pobres, ha organizado en numerosos colegios y parroquias valencianas, el Día del Ayuno Voluntario con un "almuerzo o cena del hambre", en la que sólo se consume pan, aceite y sal.
Esta campaña contra el hambre, que lleva este año como lema “El futuro del mundo, compromiso de todos” y está acompañada por una colecta, busca "fomentar un día de reflexión y de solidaridad con los 850 millones de personas que pasan diariamente hambre en el mundo", según fuentes de Manos Unidas de Valencia.
La delegación valenciana de la entidad permitirá financiar con las recaudaciones 17 proyectos en América, Asia y África, destinados a la promoción agrícola, educativa, sanitaria, social y de la mujer.
Además, con los fondos está previsto ampliar una escuela en Medellín (Colombia) para niños desplazados así como la construcción de un centro social en Timor para promover la capacitación de mujeres en ámbitos rurales.
Manos Unidas de Valencia recaudó en la campaña de 2003 más de un millón 900 mil euros, "un 1,05 por ciento más que en el año 2002", según las mismas fuentes.
El próximo domingo, las colectas de las parroquias de la diócesis de Valencia destinarán lo recaudado a la financiación de los proyectos impulsados este año por la delegación valenciana de Manos Unidas.