Durante la última peregrinación Internacional del año al Santuario de Fátima, el Obispo de Setúbal (Portugal) y presidente de la Conferencia Episcopal Portuguesa, Mons. José Ornelas, invitó a que el ejemplo de mujer, madre y esposa de la Virgen ilumine "el camino de la Iglesia".
Ayer 13 de octubre, durante su homilía, el Mons. Ornelas indicó que las manifestaciones de fe habituales tuvieron que ser limitadas para evitar contagios de coronavirus, y en ese sentido aseguró que trae al santuario "los dolores de nosotros y de la humanidad, pidiendo luz y fuerza para superar esta pandemia".
Unas cuatro mil personas asistieron a la última peregrinación internacional del año al Santuario de Fátima, que entre las medidas de bioseguridad por la pandemia de COVID-19 ha reducido el aforo para evitar contagio.
Mons. Ornelas reflexionó sobre la última aparición de la Virgen en Cova da Iria (Portugal), ocurrida el 13 de octubre de 1917, y destacó el papel de la mujer, en la imagen de María, y su "contribución decisiva a la valorización de los ministerios en la Iglesia".
"Esta presencia femenina y materna de María, a la que se ha sumado, desde la misión de Jesús y al comienzo de la Iglesia, un grupo de otras mujeres, arroja una luz de comprensión sobre la identidad y misión de la Iglesia, no como un hecho secundario o subsidiaria del protagonismo masculino, sino como un elemento constituyente importante de la Iglesia", agregó.
El Prelado enfatizó la importancia de lo femenino y maternal, y recordó que el liderazgo en la Iglesia no se funda "en la idea de poder, sino en la vida, en el cuidado y en el servicio", y es necesario utilizar los dones del Espíritu Santo para edificar la Casa de Dios.