El Gobierno de Colombia avaló recientemente la reapertura de la Catedral de Sal de Zipaquirá, primera maravilla nacional, y con ello también se reiniciaron las Misas públicas en su interior.
Desde mediados de marzo hasta fines de septiembre, la Catedral de Sal de Zipaquirá, reconocida como la primera maravilla de Colombia, estuvo cerrada debido a la expansión del nuevo coronavirus, suspendiendo las Misas que se celebraban en su interior.
Desde el 1 de octubre, el gobierno local de Zipaquirá decidió reabrir este histórico lugar ubicado en el departamento de Cundinamarca, a 45 min de Bogotá, para el ingreso de turistas locales y extranjeros. Asimismo, en coordinación con la Iglesia local se reanudaron las Misas públicas en la Capilla de la Virgen de Guasá, bajo estrictos protocolos de bioseguridad.
En declaraciones a ACI Prensa, el P. Camilo Torres, canciller de la Diócesis de Zipaquirá y capellán de la Capilla de la Virgen de Guasá, dijo que desde el 20 de marzo transmiten en vivo la Eucaristía dominical al mediodía por medio de Facebook, y que con la reapertura de la Catedral de Sal reanudaron las Misas con presencia de fieles.
"Se hizo todo un proceso para adaptarla [La Catedral] según todos los protocolos de bioseguridad que pide el Gobierno Nacional, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Turismo y Desarrollo. Ese día estuvo presente el Ministro de Comercio y Turismo, José Manuel Restrepo, él vino a darnos el certificado de que podíamos abrir", señaló.
"Desde el 1 de octubre comenzamos a celebrarla [la Eucaristía] en la nave central [de la Catedral de Sal], donde está la cruz más grande que existe en el mundo en parte subterránea, la única a 180 m bajo el nivel de la tierra, para que haya mayor ventilación y mayor espacio y menor contacto con las personas", dijo.