SAN FRANCISCO,
El Arzobispo de San Francisco (Estados Unidos), Mons. Salvatore Cordileone, alentó a los católicos a renovar su respeto y devoción a la Eucaristía a medida que se reanudan las Misas en interiores en toda la ciudad.
"¿Hemos aceptado este ayuno de la Eucaristía como una oportunidad que Dios nos ha dado para renovar nuestra devoción y amor por el sacramento?", dijo Mons. Cordileone durante su homilía de la Misa celebrada frente a la Catedral de Santa María de la Asunción el 3 de octubre.
La oficina del alcalde de San Francisco anunció el 29 de septiembre que a los lugares de culto se les permitirá realizar celebraciones en el interior al 25% de su capacidad, hasta 100 personas, a partir del 30 de septiembre.
Previamente, la ciudad solo permitía un devoto a la vez en los lugares de culto, independientemente del tamaño del edificio, mientras que permitía varios clientes en ciertos establecimientos comerciales. Las parroquias de San Francisco se habían ido adaptando a las restricciones celebrando múltiples Misas al aire libre cada domingo.
El 3 de octubre también se realizó la manifestación anual del Rosario, que comenzó en la iglesia de San Antonio de Padua con una procesión en dirección a la catedral.
Reflexionando sobre el homónimo de la ciudad, San Francisco de Asís, Mons. Cordileone puso como ejemplo la devoción de este santo a la Eucaristía y señaló que en tiempos de escándalo, corrupción y división dentro de la Iglesia, puede surgir la tentación de criticar y "hacer cosas nuestra manera".