GINEBRA,
El Observador Permanente de la Santa Sede ante las Naciones Unidas, Mons. Ivan Yurkovich, pidió una "resolución pacífica y justa" que respete los derechos humanos, para ponerle fin a los conflictos sociales y políticos que vienen escalando desde hace semanas en Bielorrusia.
"La Santa Sede ha seguido con gran atención la situación sociopolítica posterior a las elecciones en Bielorrusia y renueva su llamado a una resolución pacífica y justa de las tensiones a través del diálogo sincero, el rechazo de la violencia y el respeto de la justicia y los derechos humanos y civiles fundamentales", expresó el 18 de septiembre Mons. Yurkovich durante un debate especial sobre la situación en Bielorrusia en Ginebra como parte de la 45° sesión del Consejo de Derechos Humanos.
Este llamado ocurrió después de que el presidente Alexander Lukashenko anunció que colocaría a las tropas en alerta máxima y cerraría las fronteras de Bielorrusia.
Mons. Yurkovich recordó que el Papa Francisco viene demostrando su preocupación por Bielorrusia y la Iglesia local. Primero durante el rezo del Ángelus del domingo 16 de agosto de 2020 y luego con la posterior visita al país del secretario de Relaciones de la Sede Apostólica con los Estados, Mons. Paul Richard Gallagher, que tuvo lugar del 11 al 14 de septiembre.
"Se espera que los diversos encuentros y debates, tanto con las autoridades civiles como eclesiásticas, contribuyan a una comprensión más profunda de la misión eclesial de la Iglesia y del papel instrumental que desempeña en el fomento de la reconciliación social y la cohesión nacional", indicó el diplomático del vaticano.
Además, Mons. Yurkovich acotó que durante "búsqueda de una solución pacífica a la crisis actual, la Santa Sede considera indispensable que los manifestantes presenten sus solicitudes de manera pacífica".