El Papa Francisco afirmó que si existe una medicina para curar una enfermedad, esta debería estar al alcance de todos, durante la audiencia esta mañana con los miembros de la fundación "Banco Farmacéutico" en ocasión de su 20 aniversario.
"Desde el punto de vista ético, si existe la posibilidad de curar una enfermedad con una medicina, esta debería estar al alcance de todos, de lo contrario se comete una injusticia", dijo el Papa en el Aula Pablo VI en el Vaticano.
Al denunciar la existencia de una "marginalidad farmacéutica" que olvida a los más pobres y crea "una brecha más entre las naciones y entre los pueblos", el Santo Padre indicó que "quien vive en la pobreza, es pobre en todo, incluso en las medicinas, y por lo tanto su salud es más vulnerable. A veces se corre el riesgo de no poder recibir tratamiento por falta de dinero o porque algunas personas en el mundo no tienen acceso a ciertos medicamentos".
"Demasiadas personas, demasiados niños siguen muriendo en el mundo porque no pueden tener ese medicamento, o esa vacuna, que está disponible en otras regiones", lamentó.
Luego de alertar sobre el "peligro de la globalización de la indiferencia", el Papa propuso "globalizar el tratamiento, es decir, la posibilidad de acceso a esos medicamentos que podrían salvar tantas vidas para todas las poblaciones. Y para ello necesitamos un esfuerzo común, una convergencia que involucre a todos. Ustedes son el ejemplo de este esfuerzo común".
El Papa destacó luego el aporte de los investigadores científicos y destacó que "las empresas farmacéuticas, sosteniendo la investigación y orientando la producción, pueden contribuir generosamente a una distribución más equitativa de los medicamentos".