El culto a la llamada "Santa Muerte", común entre narcotraficantes, sicarios y distintos grupos criminales, se ha extendido en México y un sacerdote reflexionó recientemente sobre cómo la Iglesia Católica puede responder a esta distorsión de la espiritualidad.
En diálogo con el semanario Presencia de la Diócesis de Ciudad Juárez, el P. Ramiro Rochín, teólogo dogmático, señaló que "son muchas las historias que uno conoce de mafiosos que tienen sus propios ritos y prácticas religiosas, que incluyen muchas veces a la Virgen María, aunque casi siempre mezcladas con ritos paganos".
"Por ejemplo, el culto a la Santa Muerte. Muchos, en su ignorancia, creen que esto no está en contra de la fe católica y hasta me ha tocado ver imágenes de la Santa Muerte vestida como si fuera la Virgen de Guadalupe", lamentó.
"¡Es increíble hasta dónde llega la confusión de algunos!", añadió.
"Asimismo, están las prácticas de los que le rezan a la Madre de Dios para que les vaya bien en sus negocios de narcotráfico y cosas por el estilo. La lista es interminable", dijo.
Para el P. Rochín, "más que pensar en erradicar esto creo que debemos enfocarnos en siempre dar lo mejor en nuestros esfuerzos evangelizadores, con la ayuda y gracia de Dios".