El grupo de "Padres y obispos da Caminhada" (del camino), formado por exponentes de la teología de la liberación, solicitó al Papa Francisco que haya más sacerdotes negros en Brasil, considerando la gran cantidad de personas de esa raza que hay en el país sudamericano.
El mencionado grupo surgió luego de un encuentro de comunidades eclesiales de base (CEBs), una iniciativa creada en 1970 e inspirada en los métodos del marxismo cultural y que tuvo entre sus promotores a intelectuales relacionados a la teología de la liberación como Fray Betto, el ecoteólogo Leonardo Boff y Oscar Beozzo.
Hoy las CEBs están marcadas por la promoción de movimientos sociales como el Movimiento Sin Tierra (MST) y partidos socialistas como el Partido de los Trabajadores (PT) o el Partido Comunista de Brasil.
Usuarios en las redes sociales cuestionaron si los "Padres da Caminhada" apoyarían a tres conocidos cardenales negros de origen africanos que destacan por su defensa de la doctrina católica: Robert Sarah, prefecto de la Congregación del Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos; Wilfrid Napier, Arzobispo de Durban en Sudáfrica; y Francis Arinze, prefecto emérito de la congregación que dirige ahora el Cardenal Sarah.
La carta de los "Padres da Caminhada" fue escrita el 19 de junio, Solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús y Jornada de Oración por la Santificación de los Sacerdotes, en el contexto de la muerte de George Floyd en Estados Unidos, lo que generó una serie de protestas violentas contra el racismo en distintas partes del país y del mundo.
Los firmantes afirman que los sacerdotes negros, para responder "al llamado de nuestro Señor Jesucristo, como operarios de su mies", sienten en su "formación, la rodilla de nuestros formadores, presionando nuestros cuellos. Sabemos lo que significa el grito ¡No puedo respirar!".