Líderes provida en Estados Unidos advirtieron sobre la agenda abortista que Joe Biden y Kamala Harris, candidatos a la presidencia y vicepresidencia respectivamente, implementarían en sus primeros 100 días de llegar al poder.
Si bien buena parte del futuro de la lucha provida en el país se relaciona a la revisión o a revertir el fallo Roe vs Wade, que legalizó el aborto en 1973, los líderes explicaron que la presidencia tiene en sus manos una serie de nombramientos y decisiones que definitivamente afectarán la causa provida en Estados Unidos, algunos de los cuales podrían darse de inmediato.
Joseph Meaney, presidente del Centro Nacional Católico de Bioética, dijo a CNA, agencia en inglés del Grupo ACI, que Biden ha asumido "la postura más extrema en el tema del aborto".
Meany precisó que, con esta postura, Biden retiró su apoyo previo a la Enmienda Hyde –que prohíbe usar fondos de los contribuyentes para procedimientos del aborto– y "básicamente señaló con ese anuncio que no iba a tener ninguna postura, forma o camino provida".
"Podemos esperar que todo lo que sucedió durante la Administración Obama suceda otra vez", lamentó.
Biden ya ha expresado su intención de reinstaurar algunas acciones que eliminarían la protección a la objeción de conciencia de organizaciones religiosas como las Hermanitas de los Pobres, exigiéndoles proporcionar fármacos abortivos y esterilización a sus empleados en coberturas de seguros de salud, algo que las llevó a una extensa batalla legal.