Un enfermero que ayudó a los pacientes con COVID-19 a conectarse con sus familiares en medio de la soledad del hospital, logró cumplir la promesa que le hizo a la Virgen de Lourdes y agradecerle por su ayuda.
El enfermero italiano Luigi, de 39 años, ha trabajado por los últimos seis meses en un hospital en Roma, donde con un traje de bioseguridad que lo cubre de pies a cabeza daba ánimos a los pacientes y los ayudaba a hablar con sus seres queridos.
Durante el peor momento de la pandemia en Italia, Luigi hacía videollamadas para que los enfermos con coronavirus pudieran ver a sus familiares, en lo que tal vez sería la última oportunidad para decir adiós.
El enfermero indicó a EWTN News Nightly que ver a Cristo en las personas que atendía lo ayudó a seguir adelante y señaló que espera haber sido un buen samaritano para ellos.
La semana pasada, Luigi cumplió con la promesa que le hizo a la Virgen María de acercarse al Santuario de Nuestra Señora de Lourdes en Francia cuando la situación creada por la pandemia se calmara.