El Papa Francisco expresó su solidaridad a las familias de los 72 migrantes asesinados en lo que se conoció como la masacre de San Fernando, ocurrida el 24 de agosto de 2010 en México y que todavía hoy piden justicia.
"Hoy se cumplen 10 años de la masacre de setenta y dos migrantes en México. Expreso mi solidaridad a las familias de las víctimas que todavía hoy invocan justicia. El Señor nos pedirá cuentas de todos los migrantes caídos en los viajes de la esperanza", escribió el Santo Padre en su cuenta de Twitter.
El 24 de agosto de 2010, en el rancho Huizachal, San Fernando, en el estado fronterizo de Tamaulipas, 72 migrantes provenientes de distintos países como Brasil, Ecuador, Nicaragua, Honduras, Guatemala y El Salvador, fueron asesinados por el crimen organizado.
En una bodega abandonada fueron ultimados por negarse a llevar droga hacia Estados Unidos.
Freddy Lala, migrante ecuatoriano sobreviviente de la masacre, logró caminar 20 kilómetros hasta un retén de la Marina para denunciar los hechos.