En medio de la pandemia de COVID-19, muchas familias han sufrido por la pérdida de trabajo, la muerte de algún ser querido, o se encuentran luchando por no caer en el desánimo.
Ante ello, en el 2020, el Arzobispo de Bogotá (Colombia), Mons. Luis José Rueda Aparicio, brindó algunos consejos para fortalecer la virtud de la esperanza ante la "tan sorpresiva y exigente" etapa que a la humanidad le toca vivir.
La carta se titula "La esperanza nos da un nuevo ritmo", y en ella Mons. Rueda invita a las familias a recordar la frase de San Agustín: "Reza como si todo dependiera de Dios, trabaja como si todo dependiera de ti", como luz en el camino en medio del dolor causado por la pandemia del coronavirus.
1. Reconocer que todos somos frágiles
El Prelado les reafirmó su preocupación, cercanía y solidaridad con todos los que sufren por las consecuencias de la pandemia y los invitó a reconocer la fragilidad compartida que el mundo experimenta hoy en día.
"Nos duele el sufrimiento de tantas familias que han vivido el drama del contagio, la incertidumbre provocada por las limitadas posibilidades de atención y la muerte de sus seres queridos sin posibilidad de despedirlos. Sufrimos con aquellos que viven solos y han tenido que afrontar esta cuarentena más aislados que antes", señaló.