VATICANO,
Al recibir a un grupo de científicos y académicos polacos, el Papa Juan Pablo II recordó que la investigación científica requiere del aporte de las disciplinas que ayudan a comprender el alma humana.
El Santo Padre recibió al Arzobispo Zygmunt Kaminski junto a una delegación del senado académico de la Universidad de Szczecin (Polonia).
“Habéis venido -dijo el Pontífice- con motivo de un acontecimiento particular. El senado de la Universidad ha decidido que el ateneo acoja entre sus muros la Facultad de Teología, que hasta ahora ha desarrollado la actividad científica y educativa de modo independiente”.
Juan Pablo II puso de relieve que una facultad teológica “resulta de la necesidad del diálogo entre la razón y la fe”. “Un diálogo así es necesario para que los frutos de las investigaciones científicas en las diversas disciplinas sirvan al desarrollo pleno del ser humano”, agregó.
Juan Pablo explicó que “como no se puede separar la razón del alma, tampoco se puede transmitir totalmente la ciencia sin tener en cuenta las necesidades del alma humana, que está abierta al infinito”.
“Además, el desarrollo de las ciencias conlleva tantas cuestiones éticas que deberían ser resueltas respetando la autonomía de las ciencias y en el espíritu de la verdad”, agregó el Papa.