Un desconocido ingresó a una de las capillas de la Catedral de Managua (Nicaragua) y lanzó una bomba molotov que provocó un incendio y destruyó el sagrario y la imagen de la Sangre de Cristo, un hecho que ha sido calificado de "acto de terrorismo" por el Cardenal Leopoldo Brenes.
En un comunicado del 31 de julio, la Arquidiócesis de Managua (Nicaragua) informó que una persona no identificada ingresó a las 11:00 a.m. a la Capilla de la Sangre de Cristo y lanzó una bomba que incendió y destruyó parte de su infraestructura.
Según el diario local La Prensa, testigos dijeron que el sujeto ingresó a la capilla encapuchado y con un objeto en la mano, y dijo lo siguiente: "Vengo a la Sangre de Cristo". Otra testigo llamada Alba Ramírez "afirmó que el hombre que lanzó la bomba es conocido" y que "sospechan que fue un encargo planeado".
Se trata de "un acto de profanación totalmente condenable, por lo que debemos permanecer en constante oración para derrotar a las fuerzas malignas", expresó la Arquidiócesis.
En la capilla se ubica el Santísimo en su sagrario, y la consagrada y venerada imagen de la Sangre de Cristo, de casi 400 años de antigüedad y ante la cual San Juan Pablo II se arrodilló en su segunda visita a la ciudad en febrero de 1996.