El Arzobispo de Madrid, Cardenal Carlos Osoro, presidió este domingo una Misa por todos los afectados y fallecidos a causa del coronavirus.
En la Misa, celebrada en el día en que la Iglesia celebra la fiesta de San Joaquín y Santa Ana, los abuelos de Jesús, el Cardenal rezó por todos los afectados por la pandemia, como "las familias que no pudieron despedir a sus seres queridos, por las personas en riesgo, por los profesionales sanitarios, por los ancianos, por quienes han perdido su trabajo", informa una nota de la Arquidiócesis de Madrid.
El Purpurado español comentó que en un "tiempo de tanto sufrimiento", aludiendo al Evangelio de hoy sobre el tesoro escondido y el Reino de los Cielos, el Arzobispo invitó a "hacer una opción radical por Jesús y por la belleza del Evangelio".
El Cardenal también resaltó la "alegría" que suscita "haber encontrado el tesoro más grande y poderlo tener en nuestra vida".
En este tiempo en el que el mundo "anda escaso de alegría", presentar "el rostro de Jesucristo, dar la vida por Jesucristo" puede cambiar todo, aseguró.
"No estamos solos, no. Dios nos ama. Dios nos guía. Dios nos abre caminos, nos abre horizontes. Sois hermanos y os he dado mi amor para que regaléis ese amor", dijo el Arzobispo de Madrid.