El Obispo de Augsburgo (Alemania), Mons. Bertram Meier, afirmó que un año sin ordenaciones sacerdotales no es "un desastre".
Así lo indicó el Prelado en una entrevista con el periódico Augsburger Allgemeine, en la que comentó que la disminución de sacerdotes ciertamente lo hacen sentir "muy decepcionado".
"Por supuesto, como obispo, me decepciona mucho, pero tampoco lo veo como un desastre porque siempre ha habido períodos en la historia de la Iglesia" que son así, dijo el Prelado en la entrevista.
Un año antes, en el curso 2018-2019, en la Diócesis de Augsburgo solo hubo tres ordenaciones. En total en Alemania, en 2019 solo se ordenaron 57 nuevos sacerdotes. El año previo hubo solo 55.
En el año 2000 se ordenaron 154 sacerdotes en Alemania. Eso quiere decir que en 20 años el descenso de ordenaciones ha sido del 60%.
En su opinión, para revivir las vocaciones uno debe tener el valor de "dirigirse a los jóvenes de manera discreta y sin embargo de una manera específica".