El Vicariato Apostólico de Iquitos, en la región amazónica de Perú, alertó sobre la estafa que algunos realizan, haciéndose pasar por sacerdotes y pidiendo ayuda económica para luchar contra el coronavirus.
"Ponemos en conocimiento de toda la población que el día de ayer {7 de julio] interpusimos en la DEPINCRI una denuncia por el delito contra el patrimonio en la modalidad de estafa y delitos informáticos contra la fe pública, en la modalidad de suplantación de identidad, puesto que está habiendo personas que toman el nombre de sacerdotes y piden colaboración para la lucha contra el COVID-19", indica un comunicado del Vicariato publicado en su cuenta de Facebook el 8 de julio.
En el comunicado solicitan a quienes desean seguir colaborando que lo hagan "directamente en las parroquias o exclusivamente en la cuenta BCP en soles No 39030973904043, CCI: 00239013097390404338, que está a nombre del P. Miguel Fuertes Prieto, Administrador Diocesano del Vicariato Apostólico de Iquitos".
Frente al desabastecimiento de recursos médicos en Iquitos, en la región Loreto, el párroco de la parroquia San Martín de Porres (Iquitos), P. Raymond Portelli; y el P. Fuertes, lanzaron una campaña que recaudó en un solo día un millón de soles (cerca de 300 mil dólares) para la compra de dos plantas de oxígeno.
El 24 de mayo, al finalizar la celebración de la Santa Misa, el P. Fuertes indicó que gracias a las donaciones, que aún continúan, se ha logrado adquirir medicinas y una tercera planta para la ciudad.
Sin embargo, el sacerdote denunció hace algunos días que durante las noches, cuando no hay vigilancia, extraños dañan las plantas de oxígeno que se instalaron con la ayuda de donaciones para ayudar a los enfermos de coronavirus.