La agencia Fides reportó que los pasados 27 y 28 de junio diversas formaciones yihadistas se adentraron en la localidad de Mocímboa da Praia (Mozambique). Los milicianos incendiaron la iglesia local, la escuela secundaria Januario Pedro, el hospital del distrito, así como docenas de casas, automóviles y tiendas.
Fuentes locales confirmaron a la agencia Fides este ataque y diversos misioneros y religiosos, que pidieron permanecer en el anonimato por razones de seguridad, explicaron también que los "rebeldes" atacaron con gran fuerza.
Incendiaron algunos edificios, liberaron a los detenidos de la prisión local e incluso izaron las banderas negras del Estado Islámico.
Los religiosos explicaron que "las fuerzas armadas reaccionaron con fuerza. También se dispararon armas pesadas en las calles. El choque duró varias horas. Al final, las calles estaban llenas de cadáveres, incluidos civiles. Cuerpos desgarrados sin piedad".
La aldea ya había sido atacada con violencia el pasado 23 de marzo cuando, por primera vez, los yihadistas habían usado armas modernas y técnicas avanzadas de guerrilla.
Mons. Luiz Lisboa, Obispo de Pemba (Mozambique) declaró a Fides que los terroristas habían prometido que regresarían pronto. Y así fue.