VATICANO,
El Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral presentó este 7 de julio la segunda fase de trabajo que está realizado la Comisión Vaticana para el COVID-19 creada por el Papa Francisco para afrontar las consecuencias económicas y culturales de la pandemia de coronavirus y abrir canales de debate para buscar fórmulas de cara a la afrontar los futuros desafíos.
Se trató de una rueda de prensa con el tema "Preparar el futuro, construir la paz en el tiempo del COVID-19" en la que intervinieron el prefecto del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral y presidente de dicha comisión, Cardenal Peter Turkson; la coordinadora del "Task-force" economía, sor Alessandra Smerilli hma y el coordinador del "Task-force" seguridad, Alessio Pecorario.
Durante su presentación, el Cardenal Turkson explicó que los grupos de trabajo ("Task-force") sobre seguridad y economía de la Comisión Vaticana COVID-19 "han estado analizando algunas implicaciones" de la actual situación del mundo provocada por el coronavirus.
"Nos enfrentamos a una de las peores crisis humanitarias desde la Segunda Guerra Mundial. A medida que el mundo toma medidas de emergencia para hacer frente a una pandemia mundial y a una recesión económica mundial, ambas sustentadas por una emergencia climática mundial, también debemos considerar las consecuencias para la paz de estas crisis interconectadas", indicó.
En esta línea, el purpurado destacó que "no puede haber sanación verdadera si no hay paz" por lo que añadió que "la reducción de los conflictos es la única posibilidad de reducir las injusticias y las desigualdades" y recordó el reciente llamado de las Naciones Unidas para el cese al fuego.
"La Iglesia apoya firmemente los proyectos de construcción de la paz que son esenciales para que las comunidades en conflicto y post-conflicto respondan a COVID-19. Sin el control de las armas, es imposible garantizar la seguridad. Sin seguridad, las respuestas a la pandemia no están completas", advirtió Turkson.