Algunas comunidades y parroquias en Chile han encontrado una ingeniosa forma para entregar alimentos y disminuir el riesgo de contagio por coronavirus: el "delivery solidario".
Como consecuencia de la cuarentena decretada en marzo, miles de personas perdieron sus fuentes de trabajo y como consecuencia hoy padecen hambre.
Para hacer frente a esta necesidad, las parroquias y comunidades junto a los barrios, instituciones y organizaciones de la sociedad civil se han organizado para levantar comedores solidarios y ollas comunes.
De esta forma, se logran alianzas como la desarrollada por la parroquia Inmaculada Concepción de la comuna de Punitaqui, en la Arquidiócesis de La Serena, en conjunto con la municipalidad y la iglesia evangélica Asamblea de Dios Misión Brasileña.
Desde hace un mes los voluntarios católicos y evangélicos cocinan con los alimentos proporcionados por la municipalidad, logrando 60 almuerzos diarios que luego son entregados en varias casas, la mayoría de ancianos.