El Arzobispo de Arequipa (Perú), Mons. Javier del Río Alba, afirmó que las iglesias debieron abrir de modo paulatino hace varias semanas y con las precauciones necesarias para evitar el contagio del coronavirus.
"Creo que los templos debieron haberse abierto de modo paulatino y con las precauciones del caso hace varias semanas. Lamentablemente, pese a las gestiones efectuadas desde la Conferencia Episcopal Peruana, el Gobierno mantuvo el impedimento mientras durase el estado de emergencia nacional y aislamiento social obligatorio que ha concluido para casi todo el Perú el 30 de junio", indicó el Prelado en diálogo con ACI Prensa.
"No dudo que al inicio de la pandemia fue correcto cerrar los templos para evitar que se conviertan en un foco de propagación del virus, pero no llego a comprender por qué razón, por ejemplo, se permitió la apertura de centros comerciales u otros lugares antes que la de los templos", resaltó el Arzobispo.
Desde el principio de la cuarentena en Perú, los bancos, farmacias, supermercados y mercados han funcionado con un aforo reducido. Días atrás se permitió la reapertura de los centros comerciales y peluquerías también con un aforo limitado. El 1 de julio abrieron los restaurantes con un máximo de 40% de aforo.
Sin embargo, el decreto supremo N° 116-2020-PCM con el que se prorroga el estado de emergencia hasta el 31 de julio, señala que "se encuentran suspendidos los desfiles, fiestas patronales, actividades civiles y religiosas, así como todo tipo de reunión, evento social, político, cultural u otros que impliquen concentración o aglomeración de personas, que pongan en riesgo la salud pública".
Mons. Del Río explicó también a ACI Prensa que en los últimos días los obispos del Perú han presentado el "Protocolo para las Actividades Religiosas de la Iglesia Católica en tiempos de pandemia", realizado con las sugerencias del Ministerio de Salud y que deja a cada prelado la elección de la fecha del reinicio de Misas con fieles y la gradual apertura de lugares de culto.