Jóvenes católicos le cantan al mundo para seguir “adelante” en medio de la pandemia

Martínez señaló que junto a otros jóvenes dentro y fuera de Cuba comenzaron a grabar el videoclip con sus propios celulares, "lejos de estudios y equipos profesionales".

"Los ingredientes para lograrlo fueron la fe, un sueño y la ilusión de dar esperanza a los hermanos", resaltó.

Además, indicó que el proyecto fue un reto, pues no disponían de todos los materiales necesarios y "no podíamos permitirnos un guion a cumplir", pero resaltó que la experiencia fue entusiasmaste "porque fuimos testigos de mucha ilusión y entrega por parte de los jóvenes y de mucha expectación por quienes conocían y seguían el proceso de la producción".

"Uno de los cantantes, por ejemplo, es médico y se encontraba en un centro de aislamiento con pacientes de COVID-19, y se grabó en uno de sus breves recesos, sin poderse retirar ni siquiera la mascarilla", resaltó.

Asimismo, indicó que gracias a la colaboración de muchos amigos, especialmente de la Asociación Puntos Corazón, se logró tener videos de personas alrededor del mundo, como Polonia, Italia, México, Japón, entre otros.

Martínez resaltó que los creyentes experimentan miedo y preocupaciones como el resto del mundo, pero a la vez, tienen una confianza en Dios, quién no los abandona, y es esa fe que ayuda a mirar a otros y descubrir "que hay mucha vida para dar, mucha esperanza que donar, mucho consuelo que podemos alcanzar a los demás"

"La fe nos ayuda a mirar hacia el lado y descubrir que en el camino no estamos solos, que compartimos la vida, con todo su realismo, con otros seres humanos que son también nuestros hermanos", resaltó.

"Por la fe, nuestro tiempo de pandemia se ha convertido en tiempo fecundo de trabajo, de evangelización a través de las redes y de servicio a los hermanos, aún desde la distancia", concluyó.