VATICANO,
El Papa Francisco elogió "el celo pastoral y la solicitud creativa de los sacerdotes" durante el actual tiempo de coronavirus, Covid-19, quienes "ayudaron a la gente a continuar en el camino de la fe y a no quedarse sola ante el dolor y el miedo".
Así lo indicó el Santo Padre este sábado 20 de junio al recibir por primera vez a un grupo en el palacio apostólico del Vaticano. La audiencia fue concedida a una representación del personal sanitario de Lombardía, la región del norte de Italia más afectada por el coronavirus, quienes estuvieron acompañados por autoridades civiles y eclesiásticas.
"He admirado el espíritu apostólico de tantos sacerdotes que iban con el teléfono, llamando a las puertas, llamando a las casas: '¿Necesita algo? Le hago la compra...'. Mil cosas. La cercanía, la creatividad, sin vergüenza. Estos sacerdotes... que se han quedado junto a su pueblo compartiendo cuidados y atenciones cotidianas: han sido un signo de la presencia consoladora de Dios. Han sido padres, no adolescentes", destacó el Papa.
Además, el Santo Padre exhortó a recordar que "la oración es el alma de la esperanza" y advirtió que "es fácil olvidar rápidamente que necesitamos a los demás, alguien que nos cuide, que nos dé valor. Olvidar que todos necesitamos un Padre que nos extienda la mano".
Por ello, el Papa invitó a "rezarle, invocarle, no es una ilusión; ¡la ilusión es pensar en prescindir de él!" ya que "la oración es el alma de la esperanza".
"Podremos salir de esta crisis, espiritual y moralmente más fuertes; y esto depende de la conciencia y la responsabilidad de cada uno de nosotros. Pero no solos sino juntos y con la gracia de Dios. Como creyentes nos corresponde dar testimonio de que Dios no nos abandona, sino que da sentido en Cristo también a esta realidad y a nuestro límite; que con su ayuda se pueden afrontar las pruebas más duras", dijo el Papa.