ASUNCIÓN,
El Obispo de Puerto Iguazú, Mons. Joaquín Piña, alentó a los ciudadanos a confiar en la existencia de políticos buenos aunque se deba “buscarlos con lupa”, y expresó su esperanza en que se pueda “se pueda construir una sociedad mejor y terminar con esos políticos corruptos que hasta ahora pretendieron engañar con sus discursos que ya casi nadie cree”.
El Obispo hizo estas declaraciones en el campamento anual que reúne a unos mil jóvenes de la diócesis en actividades formativas y de recreación.
Para Mons. Joaquín Piña las principales víctimas de ese engaño son los jóvenes y por ello señaló que “es muy bueno que los chicos se planteen su futuro mirando un poco más allá de sus narices” y, mostrando su preocupación por aquellos “que están solo en la pavada”, preguntó “¿Qué será de ellos el día de mañana?”.
El Prelado señaló que una parte de la juventud es víctima “del tema del alcohol y de las drogas, que es por donde generalmente empiezan a perderse. Muchas veces me pregunto por qué la policía y otras fuerzas de seguridad no actúan un poco más, sobre todo controlando los lugares donde se expende esta yerba”.
Mons. Piña señaló que “es curioso que en Iguazú todo el mundo sabe, menos los que tendrían que saber. Claro que, siempre que he querido averiguar, me han dado la misma respuesta: el problema está en que todos tienen miedo de actuar porque hay mucha gente comprometida, que no son, precisamente, los pobres ‘camellos’, como dicen, sino los de arriba”.
“Alguna vez yo hablé de las grandes mafias o ‘carteles’ que tenemos también en nuestro país, y que, por supuesto, están bien ramificados por todas partes. Acabo de leer, en un diario de la Capital, lo que todos suponemos y es evidente: que el narcotráfico y el lavado de dinero vienen siempre de la mano. ¿Cómo, aquí también, algunos han hecho tanto dinero en tan poco tiempo, cuando la industria nacional estaba por los suelos? ¡Y cuántas complicidades que hay detrás de todo esto!”.