GUADALAJARA,
Tras casi tres meses de suspensión del culto público como prevención del contagio de coronavirus COVID-19, las iglesias en Ocotlán, en el estado mexicano de Jalisco, abrieron nuevamente sus puertas a las Misas con fieles el 15 de junio.
En Ocotlán, el 3 de octubre de 1847 se produjo el milagro conocido como "El Prodigio de Ocotlán": más de dos mil personas vieron aparecer en el cielo la imagen perfecta de Jesucristo crucificado.
La fiesta se celebra cada año, y multitudes peregrinan al Santuario del Señor de la Misericordia en Ocotlán.
Siguiendo las indicaciones de la Arquidiócesis de Guadalajara, de la que forma parte Ocotlán, el Santuario del Señor de la Misericordia señaló que los fieles deberán llegar 15 minutos antes de la celebración de la Misa, así como usar cubre bocas "en todo momento".
También se han colocado señales en el piso para dirigir a los fieles, y en las bancas para que sepan qué espacios pueden ocupar.